Cómo ocultar tu dirección IP

En una era en la que es habitual leer titulares sobre hackers que irrumpen en redes empresariales y personales, sitios de Internet que rastrean el comportamiento de los consumidores en línea y otras formas de espionaje e intrusión digital, no es de extrañar que muchas personas busquen formas de ocultar su dirección IP. Pero si no comprendes Internet a la perfección, todo estas historias de ciberdelincuentes, hackers, rastreo y direcciones IP puede preocuparte cada vez que te conectas a Internet.

No tienes nada de preocuparte. Existe una forma de mejorar tu seguridad y ocultar tu rastro digital de miradas indiscretas, y no es tan difícil como podrías pensar. No necesitas un título avanzado en codificación informática ni instalar costosas aplicaciones en todos tus dispositivos. Solo tienes que saber cómo ocultar tu dirección IP.

¿Qué es una dirección IP?

La sigla IP significa Internet Protocol (protocolo de Internet), que en esencia es el sistema que permite que los datos se transmitan por Internet. Una dirección IP es la dirección que se le asigna a un dispositivo específico conectado a Internet. Cada dispositivo conectado a Internet, ya sea una computadora de escritorio, un smartphone, una computadora portátil o una tablet, tiene una dirección IP única.

Cuando un dispositivo se conecta a Internet, el protocolo de Internet utiliza la dirección de este dispositivo para saber desde dónde enviar y recibir información. Y sí, a menudo, se hace un seguimiento de esta actividad. Por eso, después de hacer una búsqueda sobre mesas de cocina, por ejemplo, de repente verás anuncios de vendedores de mesas de cocina en otros sitios que visites.

Recibir anuncios personalizados no es algo tan terrible, incluso puede hacer que tu experiencia de navegación sea más agradable. Pero esa no es realmente la razón principal por la que muchas personas desean saber cómo ocultar su dirección IP.

Posibles razones por las que quieras saber cómo ocultar tu dirección IP

No hace mucho tiempo, la principal razón por la que las personas buscaban ocultar una dirección IP era para poder descargar música y películas de forma ilegal sin que los sitios que controlan esa actividad lo rastreen. Pero, con los años, muchas se dieron cuenta de que hay otras razones más importantes para aprender a ocultar una dirección IP.

Para mantener la privacidad de tu dirección física

Un hacker o ciberdelincuente sofisticado puede ser capaz de descubrir tu ubicación aproximada o incluso tu dirección física real utilizando tu dirección IP. En general, no cualquier persona puede acceder a esta información; de hecho, se suele requerir una orden judicial para recibirla. Pero alguien que utilice herramientas avanzadas de búsqueda de IP puede ser capaz de obtener una dirección física de forma ilegal.

Para evitar restricciones geográficas

Muchos países imponen duros protocolos de censura en Internet, lo cual limita los sitios disponibles para navegar. China es un ejemplo de ello. Otros países bloquean los contenidos protegidos por derechos de autor producidos en otros lugares. Por ejemplo, los videos de YouTube o Netflix que pueden verse en Estados Unidos pueden no estar disponibles para su visualización en Alemania o Irlanda. Cuando ocultas tu dirección IP, a veces, puedes engañar a los servidores para que piensen que en realidad te estás conectando a Internet desde otro país para evitar restricciones.

Para impedir que las empresas rastreen tus actividades en Internet

Es comprensible que la privacidad sea la preocupación de muchas personas. Pero casi todo lo que haces en Internet puede rastrearse y, a menudo, se hace. Muchas empresas rastrean tu actividad en línea a fines de investigar el comportamiento consumidor, lo que les permite conocer mejor sus hábitos de navegación para elaborar mejores planes de marketing. Otras empresas recopilan tus datos y los venden a grandes empresas de investigación que los utilizan por diversas razones.

Si no quieres que estudien tu información personal o la utilicen de con fines inadecuados, de seguro querrás aprender a ocultar tu dirección IP. Esto evitará que las empresas rastreen tus hábitos de navegación, así como que las redes publicitarias descubran todos los productos que te interesan. Los sitios web que visitas también tienen derecho legal a recopilar datos sobre tu actividad de navegación en ese sitio. De nuevo, esto se suele utilizar en datos de investigación de mercado, pero si quieres que tu rastro digital se mantenga privado, querrás ocultar tu dirección IP.

Impide que tu proveedor de servicios de Internet te rastree

Como era de esperar, tu propio proveedor de servicios de Internet (ISP) también rastrea tu actividad en línea. Al igual que los sitios web que visitas, tienen derecho legal a hacerlo. Lamentablemente, pone en mayor riesgo tus datos de navegación digital, ya que no sueles tener muchos ISP entre los que escoger, y no todos son igual de seguros.

Además, aunque los ISP no suelen vender tus datos, podrían proporcionárselos a empresas de estudios de mercado y redes publicitarias si así lo decidieran. Cuando ocultas tu dirección IP, no solo evitas que otras empresas rastreen tu actividad, sino también tu proveedor de Internet.

Mantén la privacidad de tus búsquedas

Si no quieres que amistades o familiares consulten tu historial de búsqueda, lo más probable es que tampoco quieras que lo hagan personas desconocidas y empresas extrañas. Los principales motores de búsqueda, como Google y Yahoo, rastrean de forma automática todas y cada una de las consultas de búsqueda que realizas, así como los sitios que visitas, los vínculos en los que haces clic, el tiempo que pasas en una página web concreta, entre otras cuestiones.

Cuando aprendas a ocultar tu IP, podrás impedir que los motores de búsqueda relacionen cualquier búsqueda que realices con tu dirección IP. Como medida adicional, puedes utilizar la opción de navegación privada que ofrecen hoy en día la mayoría de los navegadores.

Mantener tus búsquedas y tu actividad en Internet privadas también es importante si realizas muchas investigaciones privadas y confidenciales para una profesión concreta, como las fuerzas de seguridad o el periodismo de investigación.

Cómo ocultar tu dirección IP

Existen dos métodos entre los que puedes elegir para ocultar tu dirección IP. Uno es usar un servidor proxy y el otro una red virtual privada (VPN). Cualquiera de los dos será suficiente, pero hay algunas desventajas asociadas a los servidores proxy que hacen de las VPN la opción óptima para muchas personas.

¿Qué es un servidor proxy?

Imagina el tráfico de Internet circulando por las principales carreteras y autopistas. Por ejemplo, supongamos que inicias una búsqueda en Google. Ese es tu destino inicial. Cuando haces clic en el vínculo de uno de los resultados de la búsqueda, tus datos se desplazan por una ruta hasta llegar al siguiente destino: el vínculo en el que habías hecho clic. Esto continúa hasta que finalizas la actividad de navegación de la sesión.

Los datos que van de un punto a otro se enrutan a través de distintos servidores. Considéralos como un puesto de control de Internet. Cada servidor registra tu actividad y tu dirección IP. Y así, varios servidores, sitios web y otras empresas registran la ruta completa de tu actividad en Internet.

Cuando se utiliza un servidor proxy, es como conducir por las carreteras y autopistas de Internet en una limusina segura y privada con cristales polarizados. La limusina, que es el servidor proxy, tiene una dirección IP diferente a la de tu dispositivo actual que está conectado a Internet. Los servidores, motores de búsqueda y otras empresas solo ven la dirección IP del servidor proxy, no la tuya.

Ventajas y desventajas de un servidor proxy

La principal razón por la que las personas utilizan servidores proxy es para ocultar una dirección IP. Toda tu actividad en Internet se canaliza a través del servidor proxy, lo que mantiene tu propia dirección IP oculta de miradas indiscretas. Usar un servidor proxy también mejora la seguridad, ya que agrega una capa adicional de protección contra los hackers. Además, si deseas navegar por Internet de forma anónima, utilizar un servidor proxy es una de las mejores formas de ocultar tu identidad.

Uno de los mayores inconvenientes de utilizar un servidor proxy es que, aunque puedas visitar sitios web de forma anónima, el servidor proxy puede almacenar en caché información confidencial, como los nombres de usuario y las contraseñas que utilizas para acceder a una cuenta en línea. Si decides utilizar un servidor proxy, deberás evitar acceder a cuentas privadas o escoger un servidor proxy con altos niveles de seguridad.

Algunos proxy baratos pueden ser incompatibles con otras redes de servidores o con tu proveedor de internet. O puede que te molesten de forma constante con anuncios emergentes. Es recomendable que investigues antes de elegir un servidor proxy para asegurarte de elegir uno que ofrezca una sólida combinación de confiabilidad y seguridad.

¿Qué es una VPN?

Una red virtual privada (VPN) funciona de forma similar a un servidor proxy. Cuando conectes tus dispositivos a una VPN antes de conectarte a Internet, tu dispositivo parecerá estar en la misma red en la que funciona la VPN. Los datos de tu tráfico de Internet se enviarán a la VPN a través de una conexión segura y se dirigirán de forma adecuada a los sitios que desees visitar, con lo que tu dirección IP quedará privada y oculta.

Hoy en día, se recomienda que cualquier persona que quiera mejorar la seguridad de sus dispositivos y su actividad en Internet utilice una VPN. En particular, esto es cierto si sueles realizar actividades en Internet mientras usas una red Wi-Fi pública. Acceder a cuentas privadas cuando se utiliza una red Wi-Fi pública es un gran riesgo para la seguridad, pero cuando se utiliza una VPN, ofrece mucha más protección frente a los hackers. La conexión VPN está cifrada y es segura.

Ventajas y desventajas de una VPN

Las VPN son excelentes herramientas para proteger tus datos, como mensajes privados, contraseñas y nombres de usuario, información financiera y cualquier otro dato que forme parte normal de tu rastro digital. Usar una VPN no solo oculta tu dirección IP, sino que también cifra todos los datos relacionados con tus sesiones de navegación por Internet. Algunas VPN prémium utilizan protocolos de cifrado avanzados que te hacen casi invisible para cualquier otra persona en Internet.

Obviamente, las VPN también mantienen tu dirección IP a salvo de otras entidades que rastrean la actividad relacionada con la IP, como tu proveedor de internet, los motores de búsqueda, las plataformas de redes sociales o las agencias gubernamentales. Como tu dirección IP está oculta y tus datos están cifrados, tus acciones en línea pasarán por los servidores sin ser detectadas.

Si te gusta visitar sitios web o ver contenidos en línea que no suelen estar disponibles debido a restricciones geográficas, una VPN también puede ayudarte. Una VPN te permite cambiar el país del que parece proceder tu tráfico de Internet, lo que te permite conectarte con facilidad a datos solo disponibles en determinados países.

Por consiguiente, una VPN es una gran herramienta para acceder a Internet si te encuentras en un país en el que muchas acciones y sitios web de Internet están prohibidos. Una VPN con un cifrado muy potente te permitirá llevar a cabo una actividad en línea normal sin temor a las repercusiones.

No todas las VPN son iguales

Existen VPN gratuitas, pero para garantizar los máximos niveles de seguridad y cifrado, sin duda querrás utilizar una VPN de mayor calidad. Por lo general, cobran una cuota mensual. Tómate tu tiempo para investigar diferentes proveedores de VPN para que puedas familiarizarte con los diferentes tipos de características que ofrecen. Por ejemplo, Kaspersky VPN Secure Connection ofrece enmascaramiento de direcciones IP y cero registros de actividad para mejorar la privacidad y la seguridad frente a ciberdelincuentes y hackers.

Según tus necesidades, puede que no sientas que necesitas una VPN prémium. Pero desconfía de las VPN económicas o gratuitas, que no suelen ofrecer los mismos niveles de seguridad. Las VPN gratuitas también pueden estar más congestionadas o te bombardearán con anuncios mientras las utilizas. Algunas VPN pueden incluso recopilar tus datos, lo que va en contra del objetivo de utilizar una VPN.

Una VPN de confianza, aunque pueda ver tu actividad en línea, nunca retendrá ni venderá tus datos. Asegúrate de leer los detalles sobre privacidad y seguridad que ofrece cada VPN que investigues para cerciorarte de que la VPN que escojas se esfuerza al máximo por proteger tu privacidad.

Además, ten en cuenta que una VPN puede hacer que tu velocidad de Internet se reduzca. Enrutar el tráfico de Internet a través de los servidores remotos de una VPN puede provocar una conexión más lenta. Sin embargo, si valoras tu privacidad en Internet, una VPN vale la pena.

¿Cómo se instala una VPN?

Instalar y configurar una VPN es bastante simple, otra de las razones por las que cada vez son más populares entre quienes desean ocultar una dirección IP. Con la mayoría de las VPN, todo lo que tienes que hacer es instalar el software o descargar e instalar la aplicación. Puedes hacerlo tanto para computadoras como para dispositivos móviles, de modo que puedes proteger el mayor número posible de dispositivos.

Una vez instalada la aplicación, basta con crear una cuenta e iniciar sesión. Luego, cuando tengas todo listo para usar tu VPN, debes iniciarla antes de conectarte. La VPN se conectará al servidor más cercano, pero puedes seleccionar servidores en otras zonas o países si te conviene.

Cómo elegir la VPN correcta

Las distintas VPN ofrecerán diversos niveles de seguridad y cifrado, pero hay algunos criterios que también deberás tener en cuenta antes de decidirte por alguna. Para empezar, te conviene escoger una VPN que te permita utilizar varios dispositivos de forma simultánea. De este modo, si en tu casa a todo el mundo le gusta conectarse a la vez para realizar diversas actividades, todos podrán usar el mismo servicio de VPN.

Como ya mencionamos, algunas VPN también pueden afectar la velocidad de Internet. Busca una VPN que no ralentice tu actividad en línea. Por ejemplo, Kaspersky VPN Secure Connection utiliza los servidores más rápidos de todo el mundo para que no tengas que sacrificar velocidad por una forma segura de disfrutar la Web.

En última instancia, se trata de elegir un servicio de VPN en el que puedas confiar. Una VPN es un servicio destinado a proporcionar privacidad y seguridad. Para empezar, a la hora de elegir un proveedor, es mejor considerar aquellas empresas que llevan mucho tiempo en el mercado. Es un indicador de confiabilidad: si el proveedor sobrevivió, lo más probable es que no haya perjudicado a clientes, robado datos, etc.

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