Skip to main

Una VPN para tu smartphone

Usar una VPN en tu smartphone es una gran manera de proteger lo que haces en Internet. Por la cantidad de información personal que contienen y transmiten, los teléfonos inteligentes se han convertido en uno de los blancos preferidos de los hackers. El robo de identidad es uno de los tantos riesgos a los que te expone tu teléfono, incluso cuando usas tu propia red Wi-Fi en lugar de una conexión celular. Hoy, para mantenerte a salvo, es vital que sepas para qué sirve y cómo se usa una VPN.

Usar Internet siempre es un riesgo y la seguridad puede ser un tema abrumador, pero protegerse con una VPN es, por suerte, una cuestión muy sencilla.

Kaspersky VPN Secure Connection, obtener más detalles

¿Qué es una VPN?

Una VPN —siglas en inglés de “red privada virtual”— es una tecnología que permite mantener en secreto la información que viaja desde y hacia un dispositivo.

Para crear una VPN, se utiliza una aplicación que reside en el dispositivo (sea este una computadora, una tablet o un smartphone) y que se encarga de transmitir la información en un formato que nadie, salvo el verdadero destinatario, puede entender. El proceso de pasar la información a este formato se denomina cifrado.

¿Por qué es importante el cifrado? Porque cada día, a veces sin pensarlo ni notarlo, enviamos una infinidad de datos privados por Internet. Nos referimos a toda clase de información:

  • mensajes de correo con datos que no pueden divulgarse,
  • nombres de usuario, contraseñas y mensajes de redes sociales,
  • números de cuentas bancarias, información de tarjetas de crédito y otros datos financieros,
  • contraseñas de distintos sitios.

Y toda esta información, a su vez, va acompañada de detalles que pueden revelar otros secretos, como el identificador único de tu dispositivo, tu ubicación geográfica y más.

Las VPN son importantes porque las conexiones a Internet no son difíciles de interceptar, incluso para un espía poco sofisticado. Cualquier atacante que logre introducirse en tu red, sea cableada o inalámbrica, estará en condiciones de interceptar tus datos. Una conexión Wi-Fi, aun cuando esté protegida con contraseña, no puede considerarse un canal confidencial. Ocultar tus datos es el único modo verdaderamente eficaz de garantizar tu privacidad.

¿Cómo funciona una VPN?

Cuando te conectas a una VPN, se pone en funcionamiento una serie de métodos y estrategias para resguardar y anonimizar tu información.

En primer lugar se usa un método de cifrado para traducir la información a un formato que solo el destinatario podrá entender. Luego, se utiliza un protocolo de tunelización para crear un conducto cifrado dentro de la red Wi-Fi o móvil. Este túnel o conducto aísla la información y la mantiene oculta de los demás usuarios de la red (algo que vale la pena en cualquier red, sea o no segura).

El túnel cifrado desemboca en un servidor de VPN remoto, que suele estar ubicado en otro país para resguardar tu identidad. Cuando la información sale del servidor y llega a su destino, ya no es evidente de dónde salió: los datos parecen provenir del servidor remoto y no de tu dispositivo. Los servidores de VPN son, en cierto modo, intermediarios que cuidan y ocultan tus datos.

Combinados, estos métodos impiden captar, filtrar y robar tu información. El resultado es una capa de ciberseguridad y privacidad que te permitirá usar Internet con tranquilidad.

Cómo una VPN protege tus dispositivos en Internet

Las ventajas de usar una VPN

Las VPN son, ante todo, una herramienta de privacidad, pero también tienen otros beneficios.

No permiten que nadie intercepte tu tráfico de Internet. Cuando transmites información sin antes cifrarla, nada impide que la vea cualquier curioso con acceso a la red. Usar una VPN les pone un freno a los espías y a los hackers. Los datos cifrados son incomprensibles sin la clave necesaria, que es prácticamente imposible de adivinar: dar con ella por fuerza bruta le llevaría miles de millones de años a una computadora. Cerrarles la puerta a los cibercriminales te dará la confianza que necesitas para usar Internet con tranquilidad, incluso en redes públicas.

Mantienen en secreto tu verdadera ubicación. Como ya dijimos, esto se debe a que los servidores de VPN actúan como intermediarios. La información demográfica asociada a tu tráfico provendrá de otro país, por lo que será imposible saber dónde te encuentras tú realmente. A esto se suma que, en la mayoría de los casos, los proveedores de estos servicios no guardan registros sobre tus actividades. Lo que hagas al usar la VPN será un secreto para siempre.

Te dan acceso a contenidos geolimitados, estés donde estés. Algunos servicios y sitios web restringen partes de sus catálogos a ciertas regiones del mundo. Cuando ves un video, normalmente te conectas con un servidor ubicado en tu país y, de ese modo, delatas tu ubicación. Es por esto que, cuando estás de viaje, no puedes ver lo mismo que en tu casa, y cuando estás en tu casa, no puedes ver lo que miran en otros países. Al permitirte elegir un servidor de otro país, las VPN pueden camuflar tu verdadera ubicación y, en efecto, permiten que te mudes sin que te muevas de tu hogar.

 Minimizan el riesgo de que los empleados remotos expongan información confidencial por error. Si te ha tocado trabajar fuera de la oficina, seguramente hayas necesitado consultar archivos que solo están disponibles en la red interna de tu empresa. Por motivos de seguridad, las empresas no permiten acceder a ciertos recursos si no es a través de una conexión segura. Los servicios de VPN establecen conexiones con servidores privados y utilizan métodos de cifrado para limitar cualquier riesgo de filtración.

Cuándo conviene usar una VPN

Una VPN te dará acceso a ciertos beneficios y comodidades extra. Estas son solo algunas de las ventajas:

Podrás ver series y películas que solo estén disponibles en ciertos países si cambias de servidor de VPN. Si falseas tu ubicación, los servicios de video creerán que te encuentras en otro país y te permitirán ver contenidos a los que normalmente no tendrías acceso.

Verás el “verdadero” precio de las cosas cuando planees tus vacaciones. Las aerolíneas y los hoteles utilizan cookies para seguirte el rastro y saber que has estado mirando vuelos y alojamientos. Una vez que te han identificado, estas empresas se aprovechan de tu interés para mostrarte precios “inflados”. Es una treta simple, pero eficaz: les permite incitarte a cerrar una compra y, por supuesto, las ayuda a ganar más dinero. Una VPN te dará el anonimato que necesitas para evitar estos aumentos artificiales y conseguir mejores precios.

Evitarás que tu proveedor de acceso a Internet y otras empresas te sigan el rastro. No es ninguna novedad que las empresas utilizan información demográfica para adaptar sus servicios y sus estrategias de marketing. Es una práctica que no es necesariamente maligna, pero no tienes por qué estar de acuerdo en que tus datos estén en constante circulación. Existen organizaciones dedicadas a recopilar datos demográficos, que se venden luego a empresas para las que la seguridad no es primordial. En cualquier caso, cuantos más sitios tengan tu información, mayor será el riesgo de que se filtre. Al utilizar una VPN, lo que hagas en Internet no podrá vincularse a tu información demográfica.

Las ventajas de usar una VPN en tu smartphone

Una VPN para tu smartphone

En muchos casos, el teléfono se ha convertido en el dispositivo que más utilizamos para acceder a Internet, en especial cuando no estamos en casa. Como resultado, usar una VPN en un dispositivo móvil tiene hoy tanto sentido como hacerlo en una computadora de escritorio o portátil.

Al usar una VPN en tu smartphone, disfrutarás de las siguientes protecciones:

Una capa de seguridad para usar redes Wi-Fi públicas. Conectarse con el teléfono a la red de una cafetería o de otro sitio público no es inusual. Por desgracia, aun cuando la red está protegida con contraseña, los demás usuarios pueden ver que tu dispositivo está conectado. Nada impide que un hacker le pida la contraseña de Wi-Fi a un empleado y se conecte a la misma red que tú. Usar una VPN te protegerá con un manto de cifrado y anonimato.

Cifrado para tus datos financieros. Para funcionar, las apps de banca en línea necesitan transmitir tu información financiera por Internet. Algo similar ocurre con las apps de algunos sitios de compras. No es inusual que estas aplicaciones se encarguen de cifrar la información antes de transferirla, pero usar una VPN es una garantía adicional de que nadie podrá robar tus datos.

Cifrado para tus llamadas y videoconferencias. Cada vez que te comunicas por Skype, Google Hangouts o FaceTime de Apple —o, incluso, cuando haces una llamada por Wi-Fi—, existe el riesgo de que un extraño te esté escuchando. El cifrado garantiza que ninguna empresa o atacante podrá inmiscuirse en tus conversaciones.

Cómo usar una VPN en tu smartphone

No importa si tienes un teléfono con Android o con otro sistema operativo: si vas a sacarle provecho a tu VPN, deberás aprender a usar la solución. Por fortuna, ello no implica sentarse con un pesado manual de instrucciones.

La instalación suele ser simple: en general, es solo cuestión de descargar la app del proveedor desde el App Store o Google Play. En la mayoría de los casos, si el proveedor es confiable, necesitarás suscribirte a un plan pago antes de conectarte.

La configuración también es, por lo general, una cuestión sencilla: lo más probable es que no necesites cambiar los valores predeterminados. Inicia sesión con tu cuenta y la app te pedirá lo que necesite para empezar.

Conectarse a la VPN suele ser cuestión de activar un interruptor, normalmente ubicado en la pantalla principal de la app.

El cambio de servidor, si quieres camuflar tu ubicación, se hace manualmente. La app tendrá un menú con una lista de países. Ábrelo, elige un país que no sea el tuyo y listo.

Las opciones de configuración avanzadas suelen ofrecer ajustes de privacidad interesantes. Algunas apps permiten cambiar de protocolo o método de cifrado. Otras incluyen también funciones de diagnóstico y otras herramientas. Antes de suscribirte a un servicio, no olvides buscar qué funciones te ofrece cada proveedor. Así te asegurarás de que es el indicado para ti.

Cuando ya hayas aprendido a usar la app, no olvides activarla cada vez que vayas a usar Internet.

Te dejamos con estas últimas recomendaciones para usar la VPN:

Recuerda que la VPN solo cifrará el tráfico de Internet, es decir, únicamente lo que transmitas por Wi-Fi o por una red de datos móviles. Los mensajes de texto y las llamadas estándar no contarán con protección. Para realizar llamadas cifradas, usa un servicio de voz sobre IP (VoIP). Si haces una llamada por Wi-Fi o a través de un servicio como Skype o LINE, la comunicación se cursará por Internet. Para enviar mensajes cifrados, puedes usar iMessage de Apple, los mensajes RCS en Android o servicios como Facebook Messenger y WhatsApp.

Elige un proveedor en el que puedas confiar. Si una empresa no tiene políticas serias que regulen el uso y almacenamiento de tus datos, de poco vale que la VPN en sí sea segura. Recuerda que, cuando estás conectado a una VPN, tu información pasa primero por los servidores de tu proveedor y luego se retransmite a su destino final en Internet. Si el proveedor guarda algún tipo de registro, es importante que sepas qué hace con esa información. Para quienes brindan un servicio serio, lo primero es la privacidad de sus clientes. Una solución respetable como Kaspersky VPN Secure Connection es tu mejor elección.

Artículos relacionados:

Una VPN en tu smartphone: lo que siempre quisiste saber

¿Sabes qué es una VPN? ¿Sabías que puedes usar una en tu smartphone? Las VPN pueden mantener a los curiosos lejos de tu información más privada. Descubre cómo y protégete.
Kaspersky Logo