El ciberespionaje en Latinomérica ya es una realidad, según el director de investigación y análisis de Kaspersky Lab para la región, Dmitry Bestuzhev (@dmitrybest)

Dmitry Bestuzhev es director de investigación y análisis de Kaspersky Lab
Foto: Divulgación
El ciberespionaje en Latinomérica ya es una realidad, según el director de investigación y análisis de Kaspersky Lab para la región, Dmitry Bestuzhev (@dmitrybest), entrevistado por Terra durante una cumbre de seguridad informática desarrollada en Quito, Ecuador, ocasión donde el experto reveló cómo hoy cualquier gobierno -incluso en nuestro vecindario- puede acceder a poderosas y destructivas armas cibernéticas en el mercado negro para iniciar un conflicto bélico digital que, irremediablemente, desencadenaría en uno real.
De acuerdo a Bestuzhev, si bien no llega a los niveles vistos en países como EE.UU., China, Rusia, "el ciberespionaje ya existe" y de hecho ya hay gobiernos tomando acciones, como el caso de Brasil que creó en su ministerio de Defensa una fuerza de ciberdefensa y cibertaques militares. "Esto es algo absolutamente oficial. Si esto es oficial, imagínate cuántas cosas hay no oficiales", explica el analista de Kaspersky.
La compañía de seguridad rusa, sin embargo, a pesar de ser reconocida por haber revelado las mayores armas de ciberespionaje y ciberguerra conocidas hasta ahora en el mundo ¿como es el caso de Stuxnet, Flame, Gauss y Duqu- no participan activamente de iniciativas como la brasileña: "Nosotros no apoyamos esto porque tiene una causa política, y no vamos a entrometernos en las políticas internas de ningún país por malas o buenas que fueran".
El código malicioso o malware que hoy circula, y que investigaciones del Washington Post y del New York Times atribuyen a desarrollo estadounidense e israelí, fue inicialmente descubierto en Irán donde destruyó gran parte del programa nuclear de ese país.
Se trata de software tan peligroso que Eugene Kaspersky lo ha comparado con armas químicas y biológicas, de manera que la comunidad internacional debería comenzar a pensar en cómo prohibir su uso.
Según Dmitry Bestuzhev, hay gobiernos que tienen mucho interés porque este tipo de ataques ya sea con fines políticos, militares o económicos. "Son ataques baratos y anónimos, instantáneos y destructivos, incluso más que con armamento", explica, agregando que hoy también hay gobiernos que atacan a sus propios ciudadanos, para espiarlos por ejemplo o sabotear a movimientos de rebelión.
A esto, según el analista de Kaspersky, se suman los paramilitares digitales, pues "si eres gobierno y tienes dinero hay una verdadera bolsa de compra y venta de armas cibernéticas por Internet". Lo grave es que hoy gobiernos como el de EE.UU. no descartan respuestas militares a ataques cibernéticos, lo que desencadenaría una guerra "real". Y es que finalmente para Bestuzhev lo digital ya no es sólo digital, es la vida real, y en esa guerra todos saldríamos perdiendo.
Una situación dramática donde la empresa del polémico Eugene Kaspersky (Ver nota: El enigmático y polémico Eugene Kaspersky) sí está capacitada para entregar colaboración a los países a través de la Unión Internacional de Telecomunicaciones, el organismo de ONU para las telecomunicaciones e Internet. "Y, obviamente, cuando viene una solicitud de un cliente nuestro que sospecha que está infectado, uno tiene obligación comercial y ética de darle soporte técnico, no importa si es de Chile, de Venezuela o Rusia".