privacidad
¿El spam satura tus bandejas de entrada? ¿Demasiadas solicitudes de amistad y comentarios de extraños en tus publicaciones de Facebook? ¿Te siguen por todo internet los anuncios relacionados con tus búsquedas? El núcleo del problema consiste en que estás entregando demasiados datos privados. Pero nosotros te cubrimos: he aquí cinco pasos para mejorar tu privacidad online.
1. Piensa antes de compartir
No es que estés violando tu propia privacidad o te estés espiando, pero tu privacidad online empieza por ti y tus decisiones. Existe cierta información que vale la pena compartir y otra que es mejor mantener privada.
Porque no publicarías tu contraseña de Facebook, ¿verdad? Por la misma razón, debes evitar publicar otra información que pueda revelar demasiado, como tu domicilio, teléfono personal, dirección de correo electrónico y demás. Antes de compartir cualquier cosa, considera las consecuencias no deseadas y no compartas demasiada información que pueda comprometer tu privacidad digital o la de alguien más.
Existen montones de cosas que no es necesariamente seguro compartir en internet, incluyendo boletos de avión y cualquier cosa con un código QR, entre otros. Si compartes algo con un código QR o con un código de barras, básicamente lo estás regalando.
Si realmente deseas publicar una foto de un boleto en línea, edita la imagen para quitar el código QR (y tal vez el número del boleto) y hazlo de inmediato, para que las personas no puedan restaurar la información que intentaste ocultar. Por supuesto que es más seguro no compartir estas cosas por nada del mundo.
https://www.youtube.com/watch?v=ZFZ2SdgHZ3c
2. Navega por la web de modo privado
Visitar un sitio web activa un código analítico que cuenta visitantes y puntúa la popularidad de la página. Generalmente, el código analítico le pertenece en realidad a un gigante de internet, como Google o Facebook, quienes utilizan la información sobre los sitios que visitas para mostrarte anuncios basados en tus intereses. Pero también pueden ocasionar problemas de privacidad.
Una solución a ese molesto acoso es usar el modo incógnito o privado de tu navegador. Sin embargo, esta estrategia tiene sus límites. La navegación privada evita que compartas cierta información, pero no en su totalidad, con los sitios web que visitas y numerosas entidades terceras que ni siquiera conoces.
Un mejor modo es instalar una solución antirrastreo especializada: por ejemplo, Private Browsing en Kaspersky Security Cloud.
Sin embargo, ni las funciones antirrastreo ni del modo incógnito pueden ocultar tus actividades online de tu proveedor de servicios de internet (ISP por sus siglas en inglés). Muchos ISP recopilan esta información y la venden. Algunos de ellos incluso van más allá y te muestran anuncios con sus propios sistemas de publicidad. Si deseas mantener en secreto tus actividades en línea y conservar tu privacidad online, usa un filtro VPN. El uso de una red privada virtual establece un túnel cifrado seguro entre tu computadora y un servidor remoto, y todo lo que tu proveedor podrá ver es que te comunicas con ese servidor.
Naturalmente, te recomendamos el filtro VPN de nuestra solución Kaspersky Secure Connection.
Otro aspecto al cual prestar atención es qué motor de búsqueda y qué navegador utilizas. No debería sorprenderte que algunos navegadores recopilen datos y los utilicen para mostrar anuncios; y lo mismo hacen los motores de búsqueda. ¿No te gusta la idea? Utiliza los navegadores centrados en la privacidad, como Firefox; y motores de búsqueda que no rastrean a sus usuarios, como DuckDuckGo y Startpage.com.
Si optas por ellos, harás ciertos sacrificios para lograr una mejor privacidad. Por ejemplo, los resultados en los motores de búsqueda centrados en la privacidad de los datos tienden a ser menos relevantes, pues dichos motores no conocen lo suficiente sobre ti para ajustar los resultados de modo específico para ti.
En cuanto a los navegadores centrados en la privacidad online, la desventaja es su optimización de sitios web. El criterio de referencia para el diseño web moderno es Chrome, el navegador de Google. No todos los sitios web se optimizan minuciosamente para Firefox, que es más privado.
3. Configura tus redes sociales para lograr una mejor privacidad
Las redes sociales son lugares públicos, pero no todos los espacios públicos son iguales; no es apropiado mostrarles a todos ciertas cosas. Las redes sociales tienen muchos ajustes de privacidad que determinan qué información está disponible para un cierto tipo de usuarios (sin registrar, registrados, amigos de amigos, amigos y así sucesivamente).
Además, en la mayoría de los casos, las redes sociales te dan muchas otras opciones. Puedes decidir si tu perfil puede encontrarse mediante un motor de búsqueda y si otras personas pueden etiquetarte, escribirte mensajes o causarte algún tipo de molestia. Si le dedicas un tiempo a cambiar los ajustes de privacidad en las redes sociales que usas (explicamos las opciones para Facebook, Twitter, Instagram y varios otros servicios en los enlaces), el spam y los cibercriminales no te molestarán en ellas (y abundan en toda red social).
Para una experiencia más profunda en la privacidad online en redes sociales, te recomendamos usar nuestro Privacy Checker, una sencilla herramienta que describe cada ajuste en una red social elegida y te aconseja cómo configurarlo en varios niveles de privacidad en diversas plataformas. Como podrás haber notado, reforzar la privacidad significa a veces sacrificar la comodidad; dicho equilibrio es personal
Privacy Checker no se limita a las redes sociales; también puede ayudarte a configurar tu sistema operativo para lograr asimismo una mejor privacidad online.
4. Borra tus cuentas y datos o borra tus cuentas, pero conserva tus datos
Todos tenemos docenas de cuentas, muchas de las cuales apenas utilizamos o que hace tiempo hemos olvidado, pero solamente algunas de esas se suprimen automáticamente. La mayor parte de ellas perduran y cualquiera de ellas podría filtrar tu información. Como sabemos, las brechas de información y las filtraciones de datos suceden con mayor frecuencia de la deseable.
Es buena práctica suprimir las cuentas que no utilizas ni planeas usar en el futuro. No dudes en hacerlo. Esto es particularmente importante para las cuentas que contienen muchos de tus datos, como perfiles en redes sociales, cuentas de correo que no usas y cuentas en sistemas de pago.
Si has leído bastantes artículos sobre privacidad de datos en Internet y ahora consideras abandonar definitivamente al menos algunas redes sociales, no olvides que puedes hacerlo sin perder tus datos. Aquí te decimos cómo hacerlo en Instagram, Twitter, Snapchat y Facebook.
5. Usa el GDPR, que de hecho fue creado para ti
La privacidad alcanzó un nuevo nivel con el Reglamento general de protección de datos de la Unión Europea (GDPR por sus siglas en inglés). Ahora puedes solicitar un informe de los datos que una empresa tiene sobre ti. Las empresas están obligadas a responder por ley e incluso a borrar algunos de ellos bajo solicitud.
El problema es que muchas personas no entienden cómo utilizar el GDPR. Cuatro de cada cinco personas que encuestamos (82%) de hecho ha intentado retirar algo de internet, pero menos de la mitad (37%) sabía cómo hacerlo: cómo redactar una solicitud para el GDPR, a quién remitirla, qué preguntas hacer y cómo formular solicitudes. Como la mayoría de los asuntos legales, el GDPR no es sencillo.
Aquí es donde nuestro nuevo servicio, Undatify de Kaspersky, se vuelve útil para automatizar parcialmente tus solicitudes de eliminación de datos. Te ayuda a enviar solicitudes adecuadas de eliminación de datos a las empresas que no deseas que sigan almacenando o procesando tus datos. También te ayuda a aclarar las respuestas de las empresas y levantar una queja si no responden. Undatify está disponible solamente donde se aplica el GDPR.
