En vísperas de Navidad explicamos los resultados de nuestra festiva encuesta en Facebook. Se les preguntó a los usuarios que dijeranqué tipo de malware (o ninguno), asociaban con Papá Noel. Resulta que los rusos y los franceses le tienen mucho cariño al viejito y lo consideran totalmente confiable, un personaje que sólo trae alegría a los niños y que es incapaz de ninguna maldad. La mayor parte de los españoles encuestados lo ven como un troyano porque irrumpe en la casa de las personas a través de las chimeneas, algo con lo que están de acuerdo los usuarios tanto de Estados Unidos como de Croacia. Por su parte, los alemanes, eslovacos y latinoamericanos sostienen que es más parecido al spam que aparece todos los años en el mismo momento.
¿Por qué se percibe a Papá Noel de tantas maneras diferentes? Tal vez todo se resuma en que se le ve de diferentes maneras según el país. Tratemos de entender cómo ven al protagonista de la Navidad en diferentes países del mundo.
En América del Norte, es el alegre gordito Santa Claus, quien sobrevuela el cielo de diciembre en un trineo tirado por sus fieles renos. Entra en las casas por la chimenea y deja los regalos dentro de medias que cuelgan de la repisa de la chimenea. No tiene compañeros (si no contamos a sus renos ni a los duendes que lo ayudan a preparar los regalos).
En la blanca Rusia, la estrella del Año Nuevo es el rey del frío Ded Moroz, o Abuelo de la nieve. A diferencia de sus equivalentes europeos, este personaje viaja a pie y entra en las casas por la puerta. Lleva los regalos en un gran saco rojo. Es el único de los personajes festivos que viaja con una ayudante femenina: su nieta, Snegurochka, o la “Doncella de la nieve”.
Santa Claus y Weihnachtsmann se ocupan de la Navidad en Alemania. El primero, junto con su compañero Ruprecht, viene el día de San Nicolás, el 6 de diciembre, y les da regalos a los niños que se portaron bien y castiga a aquellos que se portaron mal. Weihnachtsmann es muy parecido al ruso Ded Moroz y el día de Navidad llega al pueblo montado en un burro.
El protagonista de la Navidad gala es Père Noël (algo así como el Padre de la Navidad). Visita a los niños con su asistente Chalande quien castiga a los niños traviesos. Père Noël les da regalos a los niños sólo cuando hayan apaciguado a Chalande al cantarle una canción.
Fue de Francia desde donde partió la idea de Père Noël hacia el sur de Europa, incluidos España y Portugal, y de allí a la mayoría de los países de Latinoamérica. El nombre francés se cambió ligeramente en Brasil a Papai Noel, mientras que en Perú y Argentina es Papá Noel. En Colombia, Uruguay y Ecuador tienen su propio personaje original: Papá Pasquale, que camina por las calles sobre zancos y tira fuegos artificiales, pero no da regalos a nadie. Sin embargo, es un maestro a la hora de contar historias.
En el Reino Unido los niños le piden regalos a Father Christmas. Hacen una lista de las cosas que les gustaría recibir y luego la queman en la chimenea para que el humo que sale lleve sus pedidos en la dirección correcta. Otra tradición de la Navidad británica es el discurso de la Reina, que escucha todo el país.
En Italia tienen a Babbo Natale, quien se diferencia de sus colegas porque no trae regalos. Al contrario, los niños dejan caramelos y leche al pie de la chimenea para cuando baje por ella. Los niños italianos reciben regalos de la vieja Befana, pero los que se han portado mal, sólo reciben un pequeño pedazo de carbón. No está muy claro cómo entra a las casas: dicen que es por la chimenea o, como Weihnachtsmann, sobre el lomo de un burro cargado.
En Japón, no existe ningún personaje navideño con barba y traje rojo. En cambio, el dios Hotei-osho cumple esa función. Normalmente, se le caracteriza como una cabra y se dice que tiene ojos en la nuca.
Sin importar quién sea el héroe navideño, todos lo aman y esperan ansiosos su llegada. Incluso si los regalos son modestos, logra crear una atmósfera mágica para las fiestas. Pero, ¿y la encuesta? Bueno, tal vez no deberíamos tomarla muy en serio. ¡Después de todo, el Año Nuevo está a la vuelta de la esquina!