Actualmente, la oferta de modelos de drones de uso civil es numerosa, y va desde juguetes avanzados hasta impresionantes máquinas voladoras diseñadas para cargar un peso considerable. La mayor parte se utiliza para entretenimiento o video aéreo. Sin embargo, al igual que casi todas las tecnologías, tarde o temprano alguien los usa para mal. Esto crea una demanda de sistemas para neutralizar la presencia aérea no deseada. Y la demanda, por su parte, promueve la oferta: nuestros entusiastas diseñadores han desarrollado una solución llamada Kaspersky Antidrone.
¿Cómo puede perjudicarte un dron?
Por principio de cuentas, todo VANT de uso civil (vehículo aéreo no tripulado o UAV, por sus siglas en inglés) es ante todo una cámara operada a control remoto. Desde luego, el mundo ya ha visto informes de drones que los ladrones utilizan para identificar posibles objetivos e investigar sobre los sistemas de defensa; los reporteros en busca de la primicia los usan para filmar los sets de rodaje de los episodios (entonces inéditos) de Game of Thrones; y hay tipos raros que espían las vidas privadas de los residentes de St. Louis.
Asimismo, los drones pueden transportar cargas y, en consecuencia, convertirse en vehículos de contrabando. Es cierto que, hasta el momento, su capacidad de carga aún es limitada, pero no se necesita mucha para ciertas sustancias. De hecho, según el periódico The Washington Times, las bandas de narcotraficantes mexicanos usan los drones de modo generalizado para pasar la droga a través de la frontera con los EE. UU. Es posible que los drones puedan usarse para robar materiales preciados (como platino y diamantes) de instalaciones resguardadas.
Y finalmente, un dron es un pedazo de metal que puede estrellarse súbitamente contra algo. Y ni siquiera me refiero a las embestidas intencionales. Existen numerosos informes de accidentes con drones que han tenido consecuencias más bien desagradables.
Cómo combatir los drones
Por supuesto, no fuimos los primeros en idear un repelente de drones. Otras empresas han propuesto una variedad de métodos de respuesta a los VANT. Algunos de ellos ofrecen sistemas de detección que solamente advierten al usuario sobre los drones que se aproximan, mientras que otros intentan combatir la amenaza aérea de modo más activo.
Algunos han sugerido el uso de redes; otros han entrenado aves de rapiña como interceptores. Algunos sistemas utilizan una señal falsa de GPS para desorientar al dispositivo. Pero la mayoría de las soluciones antidrones suponen variaciones de un cañón electromagnético diseñado para derribar el dron; nosotros pensamos que esto en principio es incorrecto, por no decir que no siempre es legal; lo mismo que los intentos de hackear las comunicaciones entre los aparatos y su unidad de control remoto. Preferimos el método menos invasivo de todos: la neutralización dirigida de las comunicaciones entre la unidad de control remoto y el dron.
Tan pronto como se pierda la señal de control, un VANT normal iniciará inmediatamente el procedimiento de aterrizaje o intentará volver al sitio del lanzamiento. Algunos modelos están programados para volar alrededor o desplazarse a un lugar diferente en dichos casos, pero más bien se trata de excepciones a la norma.
Pero aterrizar un dron es apenas la mitad de la batalla. El núcleo de nuestra solución es un sistema para detectar y clasificar automáticamente los objetos aéreos.
El principio tras nuestro método
Como podrás suponer, no fabricamos ningún hardware de detección o interferencia; somos una compañía de software. Por lo tanto, nuestros expertos han escrito software que utiliza datos de varias fuentes para detectar un dron que se aproxima, apuntarle las antenas de interferencia y obligarlo a descender. Nuestros socios de integración de sistemas adaptan la solución a la configuración y las necesidades reales del cliente.
Detección primaria
Con el fin de entender que un VANT se aproxima al área resguardada, se utiliza un módulo de detección primaria. Un módulo de detección es virtualmente cualquier dispositivo capaz de explorar el espacio aéreo sobre tu perímetro: cámaras fotográficas, lidares, radares o detectores acústicos. De hecho, incluso las cámaras de IPTV (televisión por protocolo de internet, por sus siglas en inglés) pueden proporcionar datos a nuestro sistema (a condición de que cubran el suficiente espacio aéreo).
Cada método tiene ventajas y desventajas. Nuestra instalación de prueba utilizar un lidar, un dispositivo que detecta objetos y mide la distancia mediante la emisión de luz monocromática (en este caso, un láser). Es verdad que puede detectar un objeto volador a una distancia más corta que, por ejemplo, un radar. Pero también puede diferenciar un dron de un ave desde una distancia mayor. Asimismo, no requiere la obtención de una licencia especial (en algunos países, es casi imposible conseguir permiso para usar un radar en un área poblada, pues el radar emite señales de radio que pueden interferir con otros equipos).
Clasificación
Una vez que haya visto (u oído) presencia aérea, el módulo de detección primaria transmite las coordenadas aproximadas del objeto al servidor y al módulo de clasificación e interferencia. Este módulo dirige una cámara de alta precisión hacia el objeto volador y lo enfoca. La imagen se envía al servidor, donde tiene lugar la clasificación propiamente dicha.
Y gracias a nuestros algoritmos de aprendizaje automático, nuestro sistema puede distinguir no solamente entre aves y drones, sino incluso establecer el modelo del dron en concreto. El programa, apenas confirme que el objeto es un VANT, activará la generación de ruido dirigida. Por supuesto, los atacantes pueden intentar disfrazar su dron, pero entonces simplemente se clasificará como un OVNI (objeto volador no identificado o UFO, por sus siglas en inglés), y el sistema responderá al OVNI del modo en que el usuario lo haya programado. Para estar seguros, lo mejor es enviar interferencias a lo largo del todo el rango de frecuencia disponible.
Equipo requerido
Básicamente, todo depende de las necesidades y de los recursos del cliente, así como del integrador. Los componentes esenciales son el equipo de interferencia que cubre las frecuencias que los fabricantes de drones utilizan, un servidor que ejecute nuestro software y una cámara de alta precisión. Se puede utilizar cualquier dispositivo primario y si se les combina, puede mejorar la precisión o el rango de detección.
Un módulo de interferencia puede rastrear un objetivo. Normalmente esto es suficiente, pero en caso de que preveas un ataque por una bandada de drones, el sistema se puede escalar con gran facilidad. El servidor necesita simplemente la suficiente capacidad para procesar los datos entrantes.
En caso de requerirse, se puede diseñar una solución móvil que se instale en un coche, no para operar en movimiento (esto es posible, pero requiere la actualización de software, aunque hasta la fecha no hemos tenido demanda de esto), sino para su uso en campo. Esta es justamente una adaptación que responde a las necesidades de la industria cinematográfica para evitar las fotografías no autorizadas del set de rodaje.